Friedrich Stowasser o como mejor se le conoce, Hundertwasser, dijo una vez: “Un pintor sueña con casas y una buena arquitectura, en la cual el hombre sea libre y se haga realidad este sueño”. Y ahí está el reflejo de su pensamiento: La Hundertwasserhaus, en la calle Kegelgasse 34-38 en Viena. Se trata de un complejo residencial municipal, fechado en 1985, estructurado por él mismo, y planificado por el profesor de universidad Joseph Krawina. Este complejo combina superficies irregulares y vegetación (250 árboles y arbustos). No se adapta a las normas y clichés convencionales de la arquitectura escolástica, sino que se trata de un viaje por la tierra de la arquitectura creativa. En el edifio se encuentran 52 viviendas y 4 locales de negocio, 16 privadas y 3 azoteas para el conjunto, en el que actualmente vive parte de la clase media de Viena.
Por desgracia, poco después de la inauguración, las tejas de la azotea comenzaron a reblandecerse, el uso de plantas ha generado gastos adicionales debido a sus raíces, los cristales de la fachada deben limpiarse mediante andamios y elevadores y su mantenimiento es realmente costoso.
Se pueden encontrar edificios análogos, labor de Friedrich Hundertwasser junto con los arquitectos Peter Pelikan y Heinz M. Springmann, en Bad Soden, Darmstadt (la Waldspirale), Frankfurt del Main, Magdeburg, Osaka, Plochingen, Wittenberg y en Thermendorf Blumau, entre otros lugares. Sin duda, una curiosidad, si uno se deja caer por la capital austríaca.
