Empezaré con el dúo sueco, Ashbury Heigths, del que os dejo esta pieza; hay más que os recomiendo encarecidamente y que ocupan mi espacio musical mientras voy de aquí para allá. Se trata de “Derrick is a strange machine”. Sonidos originales, synthpop ochentero, con una pizca de gótico y toda la frescura y desparpajo de la escena electroclash actual. Dos voces que se complementan a la perfección. Hablaremos de ellos con más profundidad en adelante.
Sigo con Minerve, un valor seguro del synthpop alemán, melodía, baile y cadencia. No os defraudarán. Sigo revisando su trayectoria y trabajos anteriores y me estoy llevando las manos a la cabeza. Ayy.. si os hubiera conocido antes !! He aquí su "Down to the ground" para dar fe de ello.
Me mantengo en mi filosofía petarda actual, con Technoir y su "Dying star". El verdadero motivo de escuchar este hit de vez en cuando, sigue siendo la fastuosa voz de Julia Beyer. Los arreglos, las bases rítmicas y la elegancia de sus temas los hacen uno de mis platos favoritos, en estas tardes de lluvia. Percusión a golpe de trueno y estribillo pegadizo que cala como este agua marziana.
Acabo (temporalmente) la revisión de lo que escucho últimamente con De/Vision. ¿Como podía olvidarlos? A pesar de no haber podido disfrutar de su directo en Barcelona (AIIIII!!!), estos alemanes siguen alegrando mis días con su ritmo bien combinado. Me descubro ante ellos pues saben combinar los temas más bailables con las baladas más intimistas. Tal vez últimamente me ha dado por ahí. El tema que os pongo en cambio, "Time to be alive" sigue la estela de los anteriores y la voluntad de que os levantéis de la silla, peguéis cuatro brincos y os preguntéis al cabo de un rato, mientras teneis la conversación más prescindible en el ascensor con el vecino de la escalera: ¿habrá oído mis gritos y bailoteos de antes?
Saludos!!
Un abrazo por el apoyo recibido a Sandri y Mimah.